¿Qué es y cuál es la importancia de Tokenomics?

“Tokenomics” es una contracción gramatical anglosajona de las palabras “token” y “economics” (economía). En este sentido, CoinDesk — portal especializado en trading — define el término como un conjunto de parámetros que establecen si un cripto-activo es valioso. Entre esos elementos se encuentran el suministro, la utilidad probable y el “ecosistema” generado para un proyecto.

Esto último es crucial porque representa los incentivos diseñados para la compra y la retención de un token a largo plazo. Además, una plataforma bien construida se traduce en una demanda sostenida a medida que ingresan nuevos inversores. Es decir, la solidez (o sostenibilidad) del ecosistema establece cuán riesgosa es la inversión en una criptomoneda determinada.

Antecedentes y contexto actual

A pesar de que el intercambio de activos digitales es una movida propia del siglo XXI, el concepto tuvo su génesis en el año 1972. Al respecto, el portal Decryp (2019) señala a B.F. Skinner — psicólogo egresado de Harvard — como el creador de la palabra. El mencionado doctor creía que un modelo económico simbólico (de tokens) con unidades de valor reconocibles podía incentivar acciones positivas.

Aunque Skinner enfocó su término hacia el estudio del comportamiento humano, actualmente forma parte de la jerga frecuente de los profesionales del trading. Igualmente, hoy día es posible encontrar el vocablo “tokenomics” en rubros económicos tan distintos entre sí como online casino Chile o el mercado energético global. (En ambos las criptodivisas son cada vez más relevantes).

Aspectos básicos del Tokenomics

Distribución y suministro

Un proyecto autosustentable de tokens debe garantizar un suministro ininterrumpido de unidades a sus usuarios potenciales. De lo contrario, la red puede existir, más, ninguna persona podrá usarla satisfactoriamente. Ante esto, los creadores de cripto-activos pueden adoptar una de tres tácticas. La primera es un sistema de recompensa a validadores con monedas recién acuñadas (minería).

La segunda estrategia es vender una porción del suministro de tokens a un número limitado de compradores en una oferta inicial de monedas (ICO – siglas en inglés). Por último, es posible distribuir las unidades entre usuarios que completen ciertas actividades o metas. Por ejemplo: Augur premia a los cibernautas encargados de verificar hechos específicos dentro de su plataforma de apuestas.

Inflación

Los mecanismos inflacionarios de los activos digitales funcionan de forma idéntica a los del dinero y los bienes físicos. Es decir, el valor de un token disminuye si existe una oferta excesiva de ellos. Por lo tanto, la evaluación de la oferta no debe considerar la utilidad o los dividendos generados para los usuarios. En realidad, lo significativo es prestar atención al nivel de suministro con respecto a la demanda.

Tres preguntas indispensables sobre la emisión, distribución e inflación de tokens

• ¿Cuántas unidades existen en el presente?
• ¿Cuántas unidades totales pueden existir?
• ¿Cuán rápido se produce la emisión de nuevas unidades del token?

Suministro fijo

El caso del Bitcoin es, evidentemente, el más tomado en cuenta. Específicamente, esta criptomoneda fue creada con una curva simple de suministro enmarcada en un período de 140 años. En ese tiempo, solo puede existir un número máximo de 21.000.000 de unidades de Bitcoin, los cuales, son liberados dentro de una tasa que es reducida a la mitad cada cuatro años.

En consecuencia, si en 2022 ya existen 19.000.000 de Bitcoins, solo quedan dos millones de unidades pendientes de emitir. Por consiguiente, es muy poco probable que ocurra una inflación muy fuerte, pues el 10,5 % restante del suministro total es insuficiente para sobrepasar la demanda.

Estabilidad de precios

Las criptomonedas (y los activos digitales en general) son muy conocidos por la volatilidad de su valor. No obstante, dicha tendencia parece no aplicarse a los objetos NFT (especialmente a aquellos relacionados con celebridades), pero sí a los juegos NFT. Para contrarrestar este problema, los líderes de proyectos necesitan asegurar un suministro acorde con los niveles de oferta y demanda.

Gobernanza

Cada proyecto tiene sus reglas particulares para el “minteo” (emisión) de tokens a la par de las normas para inyectarlos o retirarlos de la red. En algunos casos, los activos son retenidos inicialmente y, transcurrido un tiempo prudencial, liberados en el ecosistema. En otras modalidades de manejo, los desarrolladores no se involucran más allá del mantenimiento de la infraestructura de la plataforma.

Ahora bien, la mayoría de los líderes de proyectos optan por intervenir con relativa frecuencia para regular el valor del token en el marketplace. Usualmente, esa decisión es “quemar” (enviar a una cartera electrónica de dirección desconocida para el público) los activos digitales cuando su precio está descontrolado.

Estrategias complementarias de gobernanza

Algunas redes incentivan a sus usuarios a poseer, retener y usar tokens de manera periódica como método de prevención del acaparamiento (holding) de tokens. Asimismo, los sistemas de prueba de participación — PoS, por sus siglas en inglés — se basan en validadores que garantizan un intercambio justo y honesto.

Capacidad de adaptación

Los sistemas de blockchain y las aplicaciones descentralizadas son dos de los elementos que están marcando los entornos tecnológicos durante la década de 2020. De igual manera, los desarrolladores de tokens deben reevaluar constantemente las reglas de sus redes para adaptar sus proyectos a un mercado en cambio permanente. Ningún marco normativo es inamovible.