Internacional
Italia conmemora el primer Día de la memoria de las víctimas del covid-19
(Agencia Sputnik).-
Con las banderas a media asta en todo el territorio nacional, Italia celebra el Día de la memoria por los más de 100.000 ciudadanos que perdieron la vida durante la pandemia del covid-19.
Esta semana Italia celebra, una tras otra, dos fechas importantes. El miércoles se cumplieron 160 años de la proclamación del Reino de Italia, que dio inicio al proceso de la unificación del país.
Es la segunda vez que la fiesta de unidad se celebra en condiciones de pandemia. En su mensaje a la nación el presidente Sergio Mattarella subrayó: «Italia, afectada gravemente por la emergencia sanitaria, demostró una vez más el espíritu de democracia, de unidad y de cohesión. En el distanciamiento impuesto por las medidas de contención nos sentimos más cercanos y conscientes de pertenecer a una comunidad capaz de recuperarse de las adversidades».
FÉRETROS DE BÉRGAMO
A su vez, la otra fecha se celebra por primera vez. En todo el país las banderas están izadas a media asta y se hicieron minutos de silencio en memoria de los 103.432 italianos que murieron por la pandemia.
No es casual que el 18 de marzo se convirtiera en el Día de la memoria de las víctimas del covid-19. Hace exactamente un año Italia quedó conmocionada por las imágenes de la ciudad de Bérgamo: una larga columna de camiones militares transportando, desde otras ciudades lombardas, decenas de ataúdes de víctimas del virus, que los crematorios bergamascos no lograban incinerar, a pesar de trabajar las 24 horas del día.
En ese terrible mes de marzo de 2020, Bérgamo vio crecer la tasa de mortalidad en un 568 por ciento respecto a la media de los años anteriores. La localidad lombarda se convirtió en el símbolo de la tragedia que golpeó a Italia: en los primeros seis meses de la pandemia la enfermedad se cobró la vida de 3.395 ciudadanos, casi el 3 por ciento de la población.
Este jueves en Bérgamo se organizó una ceremonia de conmemoración, en la cual tomó parte el primer ministro Mario Draghi. Tras poner una corona de laurel en el Cementerio monumental de la ciudad, el jefe del Ejecutivo plantó uno de los primeros árboles del Bosque de la memoria.
«No nos podemos abrazar, pero este día debemos sentirnos más unidos en este lugar que conserva la memoria de los que ya no están», dijo Draghi en la ocasión.
FRENTES DE LA LUCHA CONTRA EL COVID
En los discursos oficiales, pronunciados en la ocasión del día de la memoria, se reitera la idea de que Italia debe renacer tras el tremendo golpe de la pandemia. Pero antes de eso hay que vencer el virus.
Hoy la vacunación es la batalla principal. La campaña, que se inició el pasado 27 de diciembre, sigue enfrentándose con varios obstáculos. En primer lugar, no faltan los que se oponen al suministro de los fármacos anticovid.
A finales de febrero, en algunas calles de la misma ciudad de Bérgamo aparecieron folletos con los logotipos del Ministerio de Sanidad, de la Agencia Italiana del Fármaco (Aifa) y de las casas farmacéuticas, en los que las vacunas se calificaban de «terapias génicas que desactivan el sistema inmunitario y permiten su reprogramación, transformando a los seres humanos en seres transgénicos con modificaciones genéticas irreversibles». El alcalde bergamasco, Giorgio Gori, pidió a los ciudadanos que los destruyeran, «si ustedes los encuentran o alguien se los da».
Otro frente de batalla es la distribución de vacunas. Por una parte, las empresas farmacéuticas no dejan de anunciar recortes de suministros para los países de la UE y, en particular, para Italia. La última en hacerlo fue Johnson&Johnson, cuya vacuna Janssen acaba de ser aprobada por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
Por otra parte, surge el problema de los decesos tras la suministración de la vacuna de AstraZeneca. La Aifa recalcó que no existe ninguna prueba de que los casos letales hayan sido causados por el fármaco, pero suspendió su aplicación, lo que no hizo más que aumentar el escepticismo de la población acerca del producto de AstraZeneca.
LA LUZ SE VE, PERO ¿CUÁNDO SALIMOS DEL TÚNEL?
Frente a todas estas complicaciones, las autoridades italianas no se rinden. Desde el 1 de marzo, un militar, el general Francesco Paolo Figliuolo, coordina la lucha contra el covid-19. Está convencido de que Italia debe distribuir medio millón de dosis de vacunas al día para alcanzar la inmunidad de rebaño para finales de junio: «Debemos acelerarnos y, si hace falta, vacunaremos a cualquiera que pase».
El primer ministro Draghi comparte este enfoque. En su discurso en Bérgamo aseguró que «la campaña de vacunación continuará, el aumento de los suministros de algunas vacunas ayudará a compensar los retrasos por parte de otras empresas farmacéuticas».
Los altos funcionarios, entre ellos el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, repiten que ya se ve la luz en el fondo del túnel. Sin embargo, en los casi tres meses que dura la vacunación se ha inoculado el 12 por ciento de la población total, con lo cual el túnel aún parece muy largo.
Hay que recorrer el túnel lo antes posible para que las tremendas imágenes de Bérgamo, que han vuelto a aparecer en los medios italianos un año después de la tragedia, definitivamente pasen a ser no más que un duro y tremendo recuerdo.
(Sputnik)